La empresa AGV, especializada en obras de infraestructura vial, continúa con su compromiso de garantizar caminos seguros y transitables en los entornos más extremos del país. Esta semana, compartió en sus redes sociales imágenes de uno de sus equipos trabajando en tareas de movimiento de suelo en la zona del Llullaillaco, en plena Puna salteña.
Las labores forman parte del plan de mantenimiento de rutas en altura, en una de las regiones más desafiantes por sus condiciones climáticas y geográficas.
Desde la empresa destacaron: “Uno de nuestros equipos de movimiento de suelo en plena operación, garantizando caminos seguros y transitables en uno de los entornos más desafiantes del país. Comprometidos con la eficiencia, incluso a gran altura”.
AGV refuerza así su presencia en el norte del país, brindando soluciones viales que permiten mejorar la conectividad en zonas de difícil acceso, fundamentales para el desarrollo logístico, turístico y productivo de la región.
